La ministra aseguró, como el dictador nazi, que no son "seres humanos". Los dos argumentaron que decir lo contrario "no tiene base científica".
(Alba Digital) – ESPAÑA:
“Un judío, independientemente de su edad, es claro que es un ser vivo; ahora bien no puede afirmarse que sea un ser humano, no hay base científica para ello”, fueron las palabras de Adolph Hitler en 1939.
La ministra que se ha encargado de liderar la reforma que pretende abrir la puerta al aborto libre en España, Bibiana Aído, pronunció casi las mismas palabras sobre otros seres humanos, los concebidos no nacidos. “Un feto de 13 semanas es un ser vivo, pero no puede ser un ser humano porque eso no tiene ninguna base científica”, fueron las palabras de Aído, en mayo de 2009.
La comunidad científica ha criticado duramente la declaración de la ministra. La doctora Gádor Joya, portavoz de Derecho a Vivir, denunció la gravedad de sus palabras: “Es la mayor aberración científica que recuerdo” y retó a Aído a que definiese “qué clase de ser vivo es un embrión humano de trece semanas. Si no es un ser humano, tendrá que ser de alguna especie. ¿De cuál señora ministra?”, le preguntó.
Por otra parte, más de dos millares de expertos: científicos, sanitarios y representantes de reconocido prestigio de diversas áreas de las Humanidades, rubricaron anteriormente el Manifiesto de Madrid, para recordar que la vida humana empieza en el momento de la fecundación. Así lo explicó en el acto de presentación de este documento Mónica López Barahona, biomédica y consultora en el área de Bioética de Naciones Unidas: “El embrión unicelular, en estado de cigoto, es vida humana y es un individuo de la especie humana. Por tanto, es objeto de los mismos derechos que cualquier otro individuo de la especie humana. Por eso entrar en una terminología de plazos no es aceptable, porque uno no pertenece más o menos a la especie humana según el número de células que tenga o según los kilos que pese”.
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